Es la primera temporada de esta serie de Netflix con seis capítulos que absorben. Imperdible.
Seis capítulos de cerca de 40 minutos son los que tiene la nueva serie de Netflix Vampiros, una producción francesa creada por Benjamin Dupas, Isaure Pisani- Ferri y Anne Cissé.
No te imagines que es similar a El mundo oculto de Sabrina. Todo lo contrario, esta es mucho más cruda y sangrienta, porque cuenta una historia ágil acerca de la familia Radescu, mitad vampiro y mitad humano, que para relacionarse con las personas, hace 17 años toman unas pastillas que inhiben el desarrollo de las células que hace cinco décadas mutaron y los convirtieron en lo que son.
Sin embargo Doïna (Oulaya Amamra), la hija menor, infringe las reglas de su madre y comienza un proceso de transformación con tan sólo 16 años, lo que la convertirá en uno más de estos seres que no pueden estar al Sol y que necesitan beber sangre para subsistir.
Ese es el momento en que comienzan los problemas. Y cómo no, si ella al no saber controlar sus impulsos pone en riesgo a toda la comunidad de vampiros que viven escondidos en París. Por lo tanto, es necesario atraparla, pese a que su progenitora –también vampiro– se niega a que el clan superior, al que supuestamente deben rendirle obediencia, se la lleve.
Lo anterior, porque la matriarca (en el rol de Suzanne Clément) no quiere que le suceda lo mismo que a ella, quien se casó con un médico genetista que hicieron desaparecer.
Ciencia + sangre: Vampiros
Pero claro, no todo resulta como lo esperaba. Esto, porque Doïna está cansada de los efectos secundarios de las pastillas, por los que decide convertirse en una más, pero al poco andar se da cuenta que no es igual, tiene otras facultades que le permiten relacionarse con las personas, siempre y cuando controle sus impulsos.
Así, este drama con toques de terror, avanza sin dar respiro. De hecho, los minutos finales de sus episodios, son el puntapié para continuar viéndola sin parar, ya que a pesar que es netamente una fantasía, esta se desarrolla tal como si fuera en la vida real: no hay súperpoderes, magia ni contacto con el diablo.
Al contrario, se las juega por buscar respuestas en la ciencia para determinar cómo actúan estas células en quienes nacen con ellas.
Ojo: en algún momento dudarás si tu vecino o conocido es un vampiro que, como esta familia, ha sabido adaptarse a las reglas sociales. Un imperdible perfecto para ver en esta época de cuarentena.
(FUENTE: finde.latercera,com)
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