Por: Reynaldo Silva Salas.
Existen muchos métodos tradicionales para neutralizar el mal de ojo, principalmente en el caso de que la víctima sean niños pequeños o lactantes; todos ellos son eficaces y respetados, y en este caso, deseo agregar uno que es poco conocido y muy antiguo.
Elementos a necesitar:
-Agua bendita.
-Aceite de oliva extra-virgen.
-Mirra en grano.
Pasos a seguir
1-Tome un frasco de vidrio con tapa y ponga dentro de él un grano machacado de mirra (la mirra se encuentra en grano con facilidad en los mercados), agregue aceite de oliva hasta llenar tres cuartos de la botella; finalmente agregue el agua bendita hasta llenar la botella. Tápela y agítela; el agua y el aceite tienden a separarse, mas eso no importa, lo importante es que los dos entren en contacto, aunque luego en reposo se separen.
2-Conserve el frasco en un sitio oscuro y fresco.
3-Cuando un niño en la casa sufra del mal de ojo, tome el frasco, agítelo de nuevo e impregne su dedo pulgar con su contenido; trace tres veces la señal de la cruz en la cabeza del niño y luego ponga la palma de su mano sobre su cabeza, para rezar a continuación el Padre nuestro en latín:
“Pater Noster, qui es in coelis, sanctificetur nomen tuum;
adveniat regnum tuum; fiat voluntas tua,
sicut in coelo et in terra.
Panem nostrum quotidianum da nobis hodie;
Et dimite nobis debita nostra,
Sicut et nos debitoribus nostris.
Et ne nos inducas in tentationem.
Sed libera nos a malo. Amén”.
Recomendación
Es más efectivo si es realizado por el padre o la madre de la criatura, y también puede ser utilizado en el caso de adultos.
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